Seducida por Morfeo

No aguantaba más, se encontraba tan cansada que los párpados estaban pesados, sus ojos parecía cerrarse, pero ella se negaba a entregarse a los placeres del Morfeo.

Cuando el sueño fue inaguantable, cuando no pudo soportar más tiempo los sentidos atentos, se dejó llevar por las fantasías ofrecidas.

Su viaje fue emprendido con gran felicidad, ella creaba todo lo deseado pero también había alguien más detrás de todo eso, un alguien que se alimentaba de sus emociones más fuertes. Siempre era así, las primeras partes eran hermosas pero a medida que el tiempo transcurría sus sueños se perturbaban al extremo de sentirse torturada. Ese alguien amaba eso, se alimentaba de sus risas pero el platillo principal eran los momentos más horrorosos y terribles.

La mayoría de veces despertaba gritando, como ahora, se detenía y reiniciaba sus gritos otra vez cuando veía su cuerpo cómodamente reposando en la cama, a sus brazos dentro del refrigerador, las piernas debajo de la cama y su cabeza dentro del monitor de pantalla plana de su computadora.

A veces detestaba dormir no por las pesadillas sino por otras cosas.

Inicio II

Estaba borracho.

La conciencia de todo lo que le rodeaba o de lo que él era, se estaba esfumando, pero intentaba permanecer dentro de la realidad lo más que podía.

Cuando todo estaba perdido, empezó a tirar polvos por todos lados. Intentaba darse impulso aun que fueran algunos pasos tambaleantes y sacaba de su mano todas las partículas que podía, lo hizo incontables veces.

Ya en los últimos momentos, cuando la locura fue extrema, cuando la borrachera estaba llegando a su pico, lo único que hizo fue tomar el revólver y disparar. La materia gris salió despedida a gran velocidad y manchó lo negro del cielo.

Así fue como Dios dejó de existir y creó el universo, las galaxias, las estrellas y los planetas.

El Inicio

-Hoy voy a empezar.-Dijo cerrando su libro.
Tomó su pluma y empezó a flotar en toda la habitación, no deseaba detenerse, estaba excitado, reía, lloraba, tenía todas las emociones en ese momento.

tutuuuu, se escucho el ruido del Messenger en la computadora. Paró todo de un solo, dejó la pluma y se puso a chatear con alguien del otro lado de la galaxia.